LOS RELOJES DE CUARZO Y LA POLARIDAD
Si hacéis este experimento os daréis cuenta que los relojes de cuarzo (los de pila) que usamos habitualmente no son tan inocuos como creíamos.
1- Quitarse el reloj de la muñeca izquierda y con la palma de la mano mirando hacia arriba colocar el péndulo y hacerlo oscilar. Al poco se pondrá a girar hacia la derecha. Esta es la polaridad de la mano izquierda en los hombres, en las mujeres será al contrario. Si hacemos lo mismo, esta vez en el dorso de la mano, veremos que el péndulo girará a la izquierda (en las mujeres al revés).
2.- Ponerse el reloj en la muñeca izquierda y hacemos los mismo, veremos que cambian totalmente las polaridades.
En los relojes de cuarzo, con cada vibración del reloj hay como una débil pulsación, la cual se envía al cuerpo etérico. Pero, aunque no sean de cuarzo, todos los relojes tienden a crear un campo etérico inadecuado, y suponen una gran interferencia para el flujo natural de nuestras energías.
Esto significa que el reloj de pulsera elimina o invierte la polaridad de la energía del brazo en que se lleva.
No hay ningún lugar del cuerpo donde sea correcto llevar un reloj. El hábito de algunas enfermeras de llevar el reloj cerca del corazón no es precisamente aconsejable. En la medida en que el reloj esté en contacto con el cuerpo, o cerca del mismo (menos de 5 centímetros), creará una importante interferencia con nuestro cuerpo etérico. Por esto, dicho efecto sería aproximadamente el mismo si se decidiera a llevarlo en el bolsillo en lugar de la muñeca.
1- Quitarse el reloj de la muñeca izquierda y con la palma de la mano mirando hacia arriba colocar el péndulo y hacerlo oscilar. Al poco se pondrá a girar hacia la derecha. Esta es la polaridad de la mano izquierda en los hombres, en las mujeres será al contrario. Si hacemos lo mismo, esta vez en el dorso de la mano, veremos que el péndulo girará a la izquierda (en las mujeres al revés).
2.- Ponerse el reloj en la muñeca izquierda y hacemos los mismo, veremos que cambian totalmente las polaridades.
En los relojes de cuarzo, con cada vibración del reloj hay como una débil pulsación, la cual se envía al cuerpo etérico. Pero, aunque no sean de cuarzo, todos los relojes tienden a crear un campo etérico inadecuado, y suponen una gran interferencia para el flujo natural de nuestras energías.
Esto significa que el reloj de pulsera elimina o invierte la polaridad de la energía del brazo en que se lleva.
No hay ningún lugar del cuerpo donde sea correcto llevar un reloj. El hábito de algunas enfermeras de llevar el reloj cerca del corazón no es precisamente aconsejable. En la medida en que el reloj esté en contacto con el cuerpo, o cerca del mismo (menos de 5 centímetros), creará una importante interferencia con nuestro cuerpo etérico. Por esto, dicho efecto sería aproximadamente el mismo si se decidiera a llevarlo en el bolsillo en lugar de la muñeca.
El reloj debería llevarse en el bolso o cartera, y no encima. Por
ejemplo, se puede poner el reloj en una de las correas del bolso, de
forma que pueda verse la hora fácilmente.
Algo sospechaba, gracias por confirmarlo.
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